Iglesia de San Ildefonso, Toledo, Castilla-La Mancha, España.
La iglesia de San Ildefonso es una iglesia de estilo barroco localizada en el centro del casco histórico de la ciudad de Toledo, España. También es conocida como la iglesia de los jesuitas y se encuentra consagrada a san Ildefonso de Toledo, patrón de la ciudad y Padre de la Iglesia.
Enclavada entre la calle de San Román y la calle Alfonso XII, la iglesia presenta una orientación noroeste-suroeste, de tal modo que su fachada frontal queda dirigida hacia la catedral de Toledo. El interior de la iglesia, con su nave principal con forma de planta de cruz latina, es de grandes dimensiones y de color blanco. En dicha nave destaca la elevada cúpula sobre el crucero. En el transepto se encuentran dos grandes retablos barrocos. De ellos, originarios de la iglesia de san Juan Bautista, hoy desaparecida, uno es San José obrero con el Niño, obra de Germán López Mejía; y el otro es El Bautismo de Cristo, del artista Alonso de Arco y fechado en 1702. A ambos lados de la nave principal se encuentran comunicadas entre sí sendas hileras de cuatro capillas menores cada una, decoradas profusamente en estilos barroco y rococó. Las capillas del lado noreste del edificio, en orden desde el transepto, están dedicadas a la Virgen de Fátima, a san Francisco Javier, al Santísimo Cristo Crucificado y a san Francisco de Borja. Del lado suroeste se encuentran las dedicadas a la Inmaculada, a la Dolorosa, a san Ignacio de Loyola y al Cristo de los Mártires. En una esquina del templo se encuentra la capilla ochavada en la que se guardan y veneran las reliquias de la iglesia. De paredes oscuras y rojas y coronada por su propia pequeña cúpula, esta capilla alberga además la figura de la Virgen del Socorro, que también es obra de Germán López Mejía. Gobernando la nave tras el altar mayor, la iglesia de San Ildefonso cuenta con un retablo que es una pintura al fresco —realizada por Alejandro y Luis González Velázquez- que presenta trampantojos y que relata la descensión de la Virgen sobre san Ildefonso para la imposición de la casulla. Bajo el retablo de ilusionismo arquitectónico y tras el altar está situado un tabernáculo de madera dorada que presenta una talla de la crucifixión. A lo largo de toda la nave se hallan distribuidas catorce estatuas dedicadas principalmente a los apóstoles y que fueron esculpidas, como uno de los retablos y la Virgen del Socorro, por Germán López Mejía.
La parte exterior de la cúpula, debido a sus dimensiones y a la localización de la iglesia, es unos de los puntos más altos de Toledo, junto a la catedral de Santa María y al alcázar, hacia los que tiene vistas notables, igual que las torres, que son visitables. En una de las torres se pueden ver tres campanas de bronce. En la fachada se pueden observar varios adornos destacables. Sobre la puerta principal original, que aún se conserva, se encuentra un bajorrelieve que representa, igual que el retablo mayor, la descensión de la Virgen sobre san Ildefonso, obra de Diego Rodríguez de Luna. Por encima de él está situada la vidriera, y alrededor de ellos hay cinco estatuas, realizadas por Mattia Carmannini y Félix Bambi, cuyas hornacinas se encuentran flanqueadas por cuatro altas columnas corintias. En la fachada está, en homenaje a los hermanos Pedro y Estefanía Manrique, el escudo de la familia Manrique de Castilla.
En el Ochavo, reposan los restos de Juan de Mariana y Jerónimo de Ripalda, llevados desde el desaparecido Colegio de San Eugenio.
The Church of San Ildefonso is a Baroque-style church located in the center of the historic center of Toledo, Spain. It is also known as the Jesuit Church and is consecrated to Saint Ildefonso of Toledo, patron saint of the city and Father of the Church.
Located between San Román Street and Alfonso XII Street, the church faces northwest-southwest, with its front facade facing Toledo Cathedral. The interior of the church, with its main nave shaped like a Latin cross, is large and white. The nave's high dome over the crossing stands out. In the transept are two large Baroque altarpieces. Of these, originally from the now-vanished Church of San Juan Bautista, one is Saint Joseph the Worker with the Child, a work by Germán López Mejía; and the other is The Baptism of Christ, by the artist Alonso de Arco and dated 1702. On both sides of the main nave are connected rows of four smaller chapels each, profusely decorated in Baroque and Rococo styles. The chapels on the northeast side of the building, in order from the transept, are dedicated to Our Lady of Fatima, Saint Francis Xavier, the Most Holy Christ Crucified, and Saint Francis Borgia. On the southwest side are those dedicated to Our Lady of Sorrows, Our Lady of Sorrows, Saint Ignatius of Loyola, and Christ of the Martyrs. In one corner of the temple is the octagonal chapel where the church's relics are kept and venerated. With dark red walls and crowned by its own small dome, this chapel also houses the figure of Our Lady of Socorro, also a work by Germán López Mejía. Dominating the nave behind the main altar, the Church of San Ildefonso features a trompe l'oeil altarpiece, a fresco painting by Alejandro and Luis González Velázquez depicting the Virgin's descent upon Saint Ildefonso for the imposition of the chasuble. Beneath the altarpiece, adorned with architectural illusionism and behind the altar, is a gilded wooden tabernacle featuring a carving of the crucifixion. Throughout the nave are fourteen statues dedicated primarily to the apostles, sculpted by Germán López Mejía, including one of the altarpieces and the Virgin of Socorro.
The exterior of the dome, due to its size and the location of the church, is one of the highest points in Toledo, along with the Cathedral of Santa María and the Alcázar, from which it offers remarkable views, as are the towers, which are open to visitors. In one of the towers, three bronze bells can be seen. Several notable decorations can be seen on the façade. Above the original main door, which is still preserved, is a bas-relief depicting, like the main altarpiece, the Descent of the Virgin Mary upon Saint Ildefonso, a work by Diego Rodríguez de Luna. Above it is the stained-glass window, and around them are five statues, made by Mattia Carmannini and Félix Bambi, whose niches are flanked by four tall Corinthian columns. On the façade, in homage to the brothers Pedro and Estefanía Manrique, is the coat of arms of the Manrique family of Castile.
In the Ochavo, the remains of Juan de Mariana and Jerónimo de Ripalda rest, brought from the now-defunct Colegio de San Eugenio.